martes, 23 de octubre de 2012

Los significados del espacio


El espacio es un contenedor de la interacción de los signos pero aporta significados tanto por la relación de los signos con los límites del espacio y su ubicación en el espacio, como por el formato que proporciona al universo emergente donde los signos representan su realidad. El formato con el  cual estamos acostumbrados es el vertical, que favorece la representación del desarrollo de un concepto, pero los otros formatos son alternativas interesantes por su capacidad de aportar nuevos significados. Así, el formato horizontal se asocia facilmente a la representación en acciones que están por desarrollarse, con énfasis en la consecución de los acontecimientos:



El formato cuadrado da estabilidad a lo representado, con el valor agregado de permanencia: 


El espacio visto como universo delimitado por los bordes, ejemplar para un mundo al cual remite, denotativa o connotativamente, se divide conceptualmente en arriba y abajo, derecha e izquierda. Son las divisiones primarias que toman con punto de partida el eje humano, la inserción del inidividuo en el espacio. Influye en gran medida su posición erguida y la ubicación de la mirada, la cual se proyecta en primer lugar en las direcciones antes mencionadas. Al simular un universo a través de una imagen, se reproducen los términos de ubicación de la mirada humana con respecto al espacio que la rodea y al cual explora. El arriba – abajo es empleado tanto con fines de representación realista como con fines de representación simbólica. Remite esta división a zonas de inserción de los signos, que desarrollan significados;  la dinámica resultante es significante por la misma construcción de los dos espacios. Por ejemplo, se puede obtener un vínculo armónico, de integración constructiva entre el mundo de abajo y el mundo de arriba:


Manuscrito Medieval
O una oposición irreversible:


Libro Medieval de Magia : Códice Abs Oppressum Tyrannus

La división entre arriba y abajo y su dinámica de significados no sólo funcionan  con elementos figurativos, sino también con elementos abstractos, como las letras, mostrando así el funcionamiento de las divisiones del espacio en el nivel semántico:

La otra partición importante del espacio es izquierda – derecha. Es importante por los significados que asignan a cada parte ( izquierda: pasado, imaginación, memoria ; derecha : acción, futuro, devenir ) y también por la actualización de estos significados en la dinámica de la imagen. Por ejemplo, pueden ir al encuentro , a una interacción entre acción e imaginación, pasado y futuro, memoria y devenir, lo que conlleva a una representación plana, dialéctica de los procesos del ser:

William Blake 
 Tim Burton
O pueden ir al desencuentro, separando los componentes y produciendo rupturas.
Pero el elemento centralizador por excelencia, que lleva la dinámica de la atracción de los elementos a su punto / espacio nuclear, es el centro. El centro no sólo captura los significados de los elementos circundantes, sino también los organiza en espacio y en movimiento.  


 Liber Chronicarum, 1495
Juntando las dos divisiones, arriba – abajo e izquierda – derecha, llegamos a una distribución del espacio que favorece las diferentes lecturas, como destacar el origen de las cosas:  


La educación de Dioniso. Fresco de la Villa de los Misterios (Pompeya)
O enfatizar el ingreso a la imaginación : 

 O advertir sobre el devenir:

 William Blake

 William Blake
Como en una oportunidad anterior se mencionó, no se trata sólo de valores significantes que se realizan cuando hay signos figurativos, sino también funciona en el caso de los signos abstractos:

Kurt Schwitters

El resultado final del aprovechamiento de los valores de la ubicación en el espacio se enriquece con el uso de la profundidad, cuyos significados pueden trabajarse por separado o pueden combinarse, como en el siguiente caso, donde se combina el devenir esforzado del individuo,  a través de las pruebas de la profundidad barroca, con la coexistencia libre y a veces incomunicada de la profundidad clásica, organziada en planos sobrepuestos :




Y una vez más, el funcionamiento de la profundidad puede ser aprovechado por la interacción en el espacio de signos abstractos:
David Carson
¿ Cuales serían las interacciones espaciales preferenciales para mostrar el carácter de laberinto del mundo o de la existencia?

Mihaela Radulescu


15 comentarios:

  1. En este artículo vemos la consideración que se debe tomar en cuanto al espacio al momento de crear una obra. El significado va de acuerdo a las ubicaciones que se realizan en el espacio.
    El laberinto puede tener connotaciones de confusión, desorden o encierro. Algunos lo podrían relacionar a lo ficcional o fantasioso, pues existen una serie de relatos o películas que han tratado este tema. Ejemplos de ello son “El laberinto del fauno”, “Alicia en el país de las maravillas”, “El origen”, etc. Otros significados podrían ser atribuidos por diferentes tipos de experiencias vividas.
    Al mencionar el laberinto del mundo se le podría vincular un significado de carácter caótico. Si se escoge este tipo de sensación, una de las posibilidades de interacciones espaciales que se le podría dar sería la siguiente:
    En primer lugar los elementos deberían estar en una composición comprimida, es decir que aquellos estarían cerca de los bordes, para así crear una atmósfera de tensión.
    El formato dependiendo si solo se quiere representar el concepto de laberinto del mundo (vertical), o si se quiere dar a entender la transición de una escena (horizontal). Para este caso sería ideal utilizar un formato horizontal para indicar el movimiento de los elementos, si es que en este caso se quiere dar una intención de plasmar el procedimiento de acumulación de elementos hacia un lado.
    Una alternativa para la división del formato sería izquierda-derecha, a la derecha irían los elementos que realizan la acción y a la izquierda los elementos acumulados, todo correspondiendo al significado de cada lado; en este caso la derecha es para la acción.
    Con toda la composición espacial sugerida se podría llegar al objetivo comunicativo de la imagen.

    FIORELLA CAJAS
    20102183

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  2. En el marco se generan espacio que forman estructura para la composición y también sentidos para la interpretación de la obra. si bien un laberinto se caracteriza en la mayoría de veces por ser un espacio enredado y confuso donde no se encuentra una salida rápida, y también se vincula con el encierro, pero por otro lado el laberinto también connota un mundo imaginario.
    Entonces yo considero que para mostrar un laberinto, la composición seria en un formato horizontal (para realzar el aspecto de interminable que tiene los laberintos), pero con elementos disminuidos en este espacio ( mostrar el encierro). Por otro lado también tendría que tener una perspectiva un paco caótica, como la gente chocando entre ellos para generar una energía que existe pero esta contenida en este espacio sin salida.

    Andrea Venero
    20100078

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  3. El formato ayuda a la lectura de la imagen y los elementos que la conforman. Para ello utilizamos, de acuerdo a lo que se va a desarrollar en la imagen el formato que se ajuste a las necesidades del emisor del mensaje.
    En el podemos ver representada las dimensiones en las cuales se desarrolla el hombre, como el arriba y abajo e izquierda y derecha. Cabe resaltar que los elementos a desarrollarse pueden ser de todo tipo, desde elementos figurativos como elementos abstractos, reforzados por su ubicación en el espacio y en la perspectiva.
    En el caso del laberinto se podría tomar un formato horizontal- rectangular en el cual se puede representar una escena dentro de este lugar además de observarlo desde un enfoque picado, en el cual el espectador pueda observar todo el espacio abarcado por el laberinto si llevar a mostrar la salida de este para reafirmar las sensaciones que este produce. La perspectiva es un elemento muy importante a tomar en cuenta ya que esta permite generar sensaciones en el espectador para una mejor interpretación de la imagen presentada.

    María Moscol Cajas
    20091826

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  4. La composición de elementos dentro de la imagen y el formato que la contiene juegan roles fundamentales en la comprensión de la misma. La composición de los elementos guía la mirada del espectador y obtención del sentido.

    Para trabajar un tema como el del laberinto debemos señalar las características de este: el laberinto representa por lo general el encierro, espacios sin salida, ritmos desordenados y confusión. Asociado a lo fantástico y leyendas, el laberinto puede connotar indecisión, la encrucijada o un reto que se debe superar, un obstáculo. En todo caso, el laberinto representa algún tipo de situación de conflicto y tensión, por ello, me parece que en una representación del laberinto éste debe abarcar todo el espacio y así generar tensión contra los bordes de la imagen. Además, una representación en la que el laberinto es un elemento prominente e invasivo logra captar la atención del espectador. Por otro lado, el formato podría variar de acuerdo a la intención: Un formato horizontal hace énfasis en la idea de continuidad y permanencia a través del tiempo mientras que un laberinto vertical podría explorar la relación entre lo divino y lo terrenal.

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  5. El espacio contenedor es un lugar donde se relacionan los signos para la generación de sentido y simulan un universo además de una realidad. Como dijo Andrea, un laberinto es un espacio enredado y confuso donde no se encuentra una salida fácil. Por esta razón, para mostrar el carácter de laberinto del mundo utilizaría una composición cuadrada, que haga referencia a la estabilidad y a la permanencia debido a que en un laberinto el personaje está destinado a permanecer encerrado. La imagen del laberinto romperá los bordes logrando que el espectador llene perceptivamente el espacio fuera del formato con más laberinto. Por otro lado, el núcleo del laberinto lo colocaría en el lado izquierdo de la composición para que, de esta forma, haga alusión al imaginario pues normalmente se asocia al laberinto con mundos fantásticos.

    ale cisneros 20100249

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  6. Hemos visto como los elementos que conforman una composición no están dados al azar, sino que siguen ciertas pautas que los significan y provocan efectos en el observador. El formato, a su vez, también está sujeto al proceso de significación, tanto por su forma como por sus divisiones y relaciones con los elementos que contiene.

    En el caso del laberinto, si queremos ordenar el espacio que lo contiene, creo que un formato cuadrado o circular ayudaría a acentuar la característica de un encierro permanente y ajeno al tiempo. Un formato cuadrado también podría resaltar el carácter icónico del laberinto, como elemento presente en mitos y relatos legendarios. Al igual que Alejandra, también opino que un laberinto que rompa los bordes de la imagen tendría un gran efecto en el observador, implicándolo en su universo. Por otro lado, creo que ubicar el núcleo del laberinto en el centro de la imagen, rodeado de formas que no siguen un orden, puede asociarse al laberinto de la existencia.

    Verónica Azaña Falcón
    20095809

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  7. El formato está fuertemente ligado en cuanto a significación se refiere en una imagen. Este puede presentarse en distintas formas e incluso dividido de diferentes maneras, ofreciendo así un espacio, condicionando y definiendo las relaciones de los elementos o personajes que lo habitan. Para provocar una sensación determinada en el espectador, debemos apoyarnos en ciertos recursos como la composición, para orientar la mirada del que descifra y que pueda encontrar un sentido. El formato además. nos va a facilitar la forma en que leemos una imagen y los símbolos que contiene, adaptándose a lo que queramos transmitir.

    Tenemos así, la idea de laberinto, un espacio de confusión, enredo, que por lo tanto van a provocar sensaciones conflictivas y tensas en el receptor. La idea de estatisismo, permanencia, de no poder salir de este espacio, se puede dar a entender encerrando la imagen en un formato simétrico como el cuadrado o incuso el círculo. Es fundamental para provocar esta sensación de tensión innata al laberinto, que el receptor no encuentre la salida dentro de lo que se ve en el formato. Para reafirmar esta idea de tensión, siempre se puede recurrir a la relación que lo contenido va a tener con los bordes, haciendo que haya cierta fricción entre estos, como buscando a toda costa una salida. Sin embargo, me pareció interesante también como posibilidad lo que dijo Ale sobre romper con los bordes para dar una sensación del espacio fuera del formato que se perciba como más laberinto, otra manera de generar esta sensación de angustia en el receptor.

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  8. Según mi punto de vista el laberinto nos da la sensación de encierro. Es por eso que en primer lugar el marco debería estar presionando los bordes de la imagen para que nos dé la sensación de no poder salir. Además considero que la imagen debería tener un elemento centralizador para dar la sensación de que nos encontramos en el medio de este y el laberinto debería estar dividido en cuatro para así resaltar el origen de las cosas, lo cual nos da un significado más amplio para la imagen.

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  9. Como se nos explicó en clase, por más de que el cerebro lea de izquierda a derecha, la visión de nuestra mirada siempre se va al punto derecho superior en la primera vista que tenemos de las imágenes u hojas que se nos presenten (es por eso que ese espacio cuesta más en las revistas o periódicos). Sin embargo, definitivamente el formato aporta a la función interpretativa o semántica de la imagen.
    Para la imagen del laberinto utilizaría una composición circular, porque me remite a lo eterno, a lo cíclico, y a su vez le integraría elementos curvilíneos que muestren que no hay una salida y que sea una enredadera inentendible. Además, le pondría unos bordes marcados, para que se entienda que no hay escapatoria.

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  10. En el formato se encierra el mensaje, también ubica los elementos para lectura y la decodificación de los signos.
    Creo que el laberinto se puede mostrar en un formato vertical, porque se puede usar el formato para graficar la profundidad con la finalidad de denotar la amplitud del mismo, el laberinto siempre es característico por su gran tamaño, y además con el cual se puede connotar la gravedad de la situación, sea en un aspecto físico o psicológico. Así mismo refuerza la sensación de atrapo y desesperación del personaje que esta en éste.
    Pero también creo que puede funcionar en un formato horizontal, ya que se puede graficar el movimiento dentro de éste, el desplazamiento que ejercer el personaje para poder salir del mismo. En algunas películas se grafica esto así, sobre todo cuando hay una persecución, ya que el formato más amplio permite ver al perseguido y al perseguidor.

    Cecilia Alvarez Calderon
    20094426

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  11. Como bien dice el texto, el espacio es muy importante ya que en el se contienen los signos y se muestra la interacción entre ellos, dependiendo de los limites entre estos y su ubicación, así como también del formato, para poder darle una significación e interpretación.
    Para mostrar el laberinto del mundo o de la existencia, a mi parecer seria favorable usar un formato circular, ya que este representa lo infinito e interminable, y da la sensación de caminar en el mismo lugar sin poder salir de este. Además situaría el núcleo del laberinto en el lado izquierdo, porque es ahí donde se muestra el sentido de la imaginación, memoria y pasado, y a mi parecer al momento de intentar salir de este el núcleo se convertirá en el pasado, pero siempre en parte de la imaginación. También este espacio circular estaría lleno de líneas tanto orgánicas como ortogonales, representando el caos y todos los elementos por los cuales esta formado el mundo (tan solo en formas abstractas), y los bordes que delimiten el laberinto circular serian muy marcados y gruesos, para simbolizar ese encierro.

    Camila Montenegro Hidalgo
    20095444

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  12. Para definir la figura del laberinto asociado al tema de la existencia es necesario plantear la imagen desde un formato cuadrado, asociándolo a la estabilidad del propio laberinto, aun cuando podemos jugar con la representación de lo caótico de la existencia, de donde podemos debatir sobre las características de la misma o del propio laberinto, e incluso se puede plantear al fin y al cabo un laberinto consistente con la irrealidad al interior del plano de la existencia, como si se tratase de un laberinto mental, y por ende podríamos representarlo de izquierda a derecha o en formato de transición, de eventos, más horizontal quizás. Por otra parte, si estamos definiendo las características del laberinto en sí mismo, se puede abordar la relación que más nos interese respecto al carácter como símbolo que el icono posee. Pudiendo abarracar desde la prisión material, hasta la relación que tiene con la vida y la muerte (volcándonos al mito de Teseo), y quizás allí podemos ubicar su vínculo con la existencia. Si trabajamos de esa manera podemos jugar con la connotación de ambos y plantearnos una solución espacial que apela en un primer momento a la centralidad, a la disposición icónica del laberinto y su carácter de encierro, ubicándolo tal vez al interior de un espacio de mayores dimensiones, del que se nos aparta por estar al interior del mismo laberinto, o tal vez por otro lado, podríamos plantearlo extremadamente próximo a los límites del formato donde la sensación asfixiante sería mucho más fuerte, y en ese sentido más idónea. Para manifestar el extravío, como parte del carácter semántico del símbolo o la confusión en su interior, podría resultar necesario tomar una composición que trabaje con espacios reducidos, o multiplicidad de elementos que operen para confundir el sentido de la lectura de la imagen, sin atentar con el orden rígido que puede representar la propia figura. En ese sentido es más conveniente trabajar sobre una escena de carácter estático, salvo se pretenda desarrollar la idea de superación del obstáculo que el laberinto representa, partiendo de la negación hipotética del espacio libre, buscando homogenizar el arriba con el abajo, más allá incluso del equilibrio, hacia el aprisionamiento. Sin embargo también es cierto que debemos tener muy en cuenta si va a coexistir este ícono con una historia lineal o estática, pues pretenderíamos alargar el formato para estos fines, tomando como punto de consideración el tema del pasado y el futuro como dentro del discurso de la relación entre izquierda y derecha (tomar en cuenta también la orientación de lectura diferenciada de oriental y occidental). Pero es necesario siempre tener en cuenta que al representar al laberinto estamos jugando con opciones, con entradas y salidas, y en ese sentido, puede existir un refuerzo en el espacio y en la duplicidad y el equilibrio de las imágenes y su distribución. Es interesante también, ya respecto a la existencia, plantearnos que esta abstracción puede ser definida como una serie de situaciones, pero la representación más común alude al paso del tiempo, de donde podemos encontrar la idea sugerida de este fenómeno izquierda-derecha para definir el transcurso del tiempo, la edad, la mortandad. En qué medida se puede crear la sensación de encierro basándonos solo en el manejo del espacio y la complejidad de la existencia, bueno es interesante pero todo dependerá siempre de lo que queramos decir sobre ambos símbolos, en su relación, en su connotación, simbólica o no, siempre en la medida de su establecimiento cultural como símbolo (cabe preguntarse, si el mundo asiático o el islam trabajarían con los mismos ordenes estructurales o las mismas historias respecto a estos símbolos, por ejemplo sobre temas de reencarnación, o la simple lectura de información de derecha a izquierda diferente de la occidental).

    Cristina Frisancho Pinto
    20071804

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  13. El espacio dentro de la composición ayuda a captar nuestra atención el la imagen, en dirigir la mirada a un cierto punto. Como ya se a mencionado el marco, los limites de la imagen generan el espacio donde se contiene la imagen, muchas veces se puede jugar con estos limites. En el caso del laberinto, todos estamos de acuerdo con la sensación de caos que debe existir y los ritmos que se deben presentar. En mi opinión el especio cuadrado o vertical ayuda mucho a crear un espacio de perspectiva, siempre se podrá continuar hacia arriba, hacia abajo, izquierda o derecha. Es lo resaltante de un laberinto que no se tiene un sentido de ha donde se dirige; la idea principal es perderse en el. Pienso que el punto de máximo laberinto debería estar al lado derecho ya que para mí, es como algo futuro, algo que mientras mas avances mas te enredaras en este espacio.

    Daniela Angeles Mamani
    20095319

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  14. Como hemos visto en los ejemplos, el espacio es una pieza fundamental para darle significado a toda la composición. La mezlca de ellos, genera armonía y significado en conjunto. Ahora para darle carácter a un tema, se debe entender que los movimientos, colores y forma del formato debe estar en completa empatía con el tema, por ejemplo, si se pone una escena de amor, el formato debe ser vertical para que la forma de envolvimiento no sea tan cerrada y un color característico seria el rojo en muchas cultura.
    Por otro lado, sin embargo, esta el laberinto, un tanto opuesto al ejemplo mencionado ya que para demostrar un laberinto el ambiente es caótico, comprimido. Existen varios artistas tanto en la pintura como en el cine que han demostrado la idea del laberinto en sus obras tales como Escher, Changha Hwang, o en las películas como la mas celebre, el “Laberinto del fauno” (2006), de Guillermo del Toro, o como “Labyrinth ” (1986) de Jim Henson, en ella muestra una serie de laberintos como las obras que muestra Escher o el clásico laberinto hecho de plantas.
    Es por ello que para representar el laberinto, la idea de encierro debe estar presente a través del caos de los objetos, además, el espacio deber ser cuadrado, representando la permanencia del sujeto, un lugar sin salida. Además, así como Changha, el laberinto también implica el uso de colores vibrantes, en el sentido de que genere un caos compositivamente.
    EL laberinto es interpretado de mil maneras, ya sea simbólicamente como en la película “El origen” o de una forma más clásica, ya interpretada como muchos como un juego de callejones sin salida, como un campo de juego, así como tenemos en la película “El perfume”.

    Stefhannia Victorio
    20095757

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  15. Me parece que el uso de la composición disponiendo los elementos de diferentes maneras en el espacio es la forma más acertada de transmitir sensaciones en el espectador.
    Las interacciones espaciales para mostrar el laberinto con el mundo de la existencialdad y la no existencialdad está en el eje del laberinto en sí, en como se maneja con su forma externa. Un laberinto de por sí tiene un equilibrio, una forma de resolverse, una forma de ingresar, una forma de salir. Lo que rompe con el equilibrio del laberinto y su existencial en el mundo es lo que trae ese laberinto. El minotauro es aquel desequilibrio que hallamos dentro del laberinto, es un ser que dentro de lo onírico de un laberinto, agrega una carga aún más quimérica a lo irreal del laberinto. Me parece que lo que ata al laberinto a lo existencial es el sentimiento del minotauro desde dentro en sí, estas sensaciones que no son descifrables a simple vista sino que están más relacionadas al aprisionamiento del personaje en sí, a los sentimientos del minotauro y a lo que infiere el estar encerrado en un laberinto. A lo subjetivo que es el hallar un equilibrio real en un espacio que ha sido diseñado para crear caos y confusión.

    Montserrat Bofi R.
    20100082

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